Luis Fernando Granados (organizador) e Hipólito Rodríguez (alcalde de Xalapa)
al cierre del evento
El 28 de agosto de 2018, en la ciudad de Xalapa, México, se llevó a cabo el coloquio El derecho a la ciudad: Medio siglo de una idea revolucionaria. La iniciativa fue coordinada por un grupo académico llamado Espacio, Territorio, Cultura (ETC) donde confluyen investigadores de diversas disciplinas adscritos al Instituto de Investigaciones Histórico-Sociales (IIH) de la Universidad Veracruzana. Desde hace un par de años, éstos organizan debates en torno a obras que han marcado el siglo XX y, por primera vez, con motivo del cincuenta aniversario de la publicación del libro El derecho a la ciudad de Henri Levebvre, resolvieron llevar adelante un coloquio de mayor envergadura.
En el primer bloque de presentaciones, Malik Tahar comenzó por ubicar a Lefebvre en escenario político de los años sesenta (tercermundismo, situacionismo, marxismo occidental), sin dejar de lado su compleja relación con el Partido Comunista Francés ni las ideas que animaron las revueltas de mayo de 1968. Desde una lectura más actual, Rodrigo Díaz habló de las consecuencias nefastas que ha tenido una planeación basada en el automóvil sobre la vida cotidiana en la ciudades latinoamericanas. Aunque su postura converge plenamente con la crítica a la planificación elaborada por Lefebvre, el chileno aseveró que el concepto lefebvriano del derecho a la ciudad resulta inoperable desde el punto de vista del urbanista, que requiere ordenamientos para la acción. En su calidad de historiador, Luis Fernando Granados ofreció por su parte una relectura del hecho colonial en América Latina a partir de la distinción que opera Lefebvre entre la ciudad-obra (ciudad medieval) y la ciudad-producto (ciudad capitalista). Claudia Zamorano cerró el panel retomando la categoría de revolución urbana para hacer el puente con los trabajos más recientes de David Harvey.
El segundo panel se enfocó en algunos trabajos que hacen la distinción lefebvriana entre hábitat y habitar. Dora Sánchez abordó la visión ideal de la vivienda obrera de los años treinta; Laura Elisa Valera se enfocó en el proceso de patrimonialización de una colonia popular del centro de Puebla; y Rihan Yeh expuso los procesos de marginalización y estigmatización sufridos por las poblaciones migrantes que en su tiempo llegaron a poblar la zona de la garita que separa a México y Estados Unidos en Tijuana. Jerónimo Díaz, por su parte, desde su experiencia en la Oficina para AMérica Latina de HIC, habló de la Carta Mundial por el Derecho a la Ciudad y de la forma original que han encontrado los cooperativistas latinoamericanos (particularmente FUCVAM) para realizar este derecho.
Por la tarde la discusión giró en torno a la ciudad sede del coloquio. Paulo López revisó la historia de la huelga inquilinaria acontecida en los años veinte y sus posibles consecuencias sobre la expansión urbana en los años subsecuentes, con la creación de colonias agrícolas y proletarias. Víctor Andrade, también del IIH hizo hincapié en cómo las ideas de Lefebvre influenciaron al movimiento de izquierda en Xalapa en los años setenta, mientras que Ana Isabel Fontecilla, expuso las consecuencias y contradicciones que encierra el actual proceso de gentrificación de aquella ciudad. El evento concluyó con la participación de Hipólito Rodríguez, quien además de elaborar una brillante síntesis de las ideas de Lefebvre, fue puesto a prueba por las agudas preguntas del público. Dada su calidad de Alcalde de izquierda, recientemente elegido, Rodríguez se enfrenta efectivamente a la difícil tarea de pasar de la teoría marxista a la práctica política y urbana.
Nota de Jerónimo Díaz, UAM Azcapotzalco