La PGDC en la Segunda sesión de la Asamblea de ONU-Hábitat

Predicar con el ejemplo: una completa realización de los compromisos de la NAU para avanzar en un cambio estructural

En un momento en que ONU-Hábitat y países miembros se reúnen para avanzar en su plan estratégico, les instamos a centrarse en vías de acción y políticas concretas anclados en los compromisos clave de la NAU. Para ello, les instamos a:

1. Comprometerse a una implementación acelerada de la Nueva Agenda Urbana, aprovechando el Derecho a la Ciudad como motor para su realización, acordando mecanismos concretos para consagrar sus compromisos hacia la transformación de los modelos de desarrollo urbano y económico, con el compromiso central de proteger la función social y ambiental de los territorios, apoyando iniciativas y programas comunitarios y sociales y solidarios, así como avanzando en la gestión democrática de las ciudades y territorios a través de la participación inclusiva y la toma de decisiones colectivas;
2. Reconocer y apoyar a los gobiernos locales y a las organizaciones de la sociedad civil como actores clave en el seguimiento e implementación de la NAU, partiendo de las iniciativas transformadoras que están impulsando dichos actores, considerando la ciudad como un bien común no lucrativo cuya gestión debe activamente incluir todo el tejido social, promoviendo la participación directa de las personas directamente afectadas por los proyectos y políticas, como en el caso de la propuesta de «Plan de acción global para la transformación de los asentamientos informales y los barrios marginales»;
3. Emprender una evaluación verdaderamente participativa del plan estratégico de ONU-Hábitat, apoyando la participación de la sociedad civil, los gobiernos locales y regionales y otras partes interesadas a través de un Mecanismo de Participación de Partes Interesadas democrático, inclusivo y autoorganizado, en consonancia con las mejores prácticas en todo el sistema de las Naciones Unidas. Esto prevé que ONU Hábitat, los órganos de gobierno y todas las partes interesadas pertinentes impulsen políticas que conduzcan a acciones que apoyen las iniciativas transformadoras lideradas por dichos actores, bajo los principios de descentralización y gestión democrática de los territorios. Esto incluye mejorar el enfoque centrado en las personas haciendo operativos los principios y compromisos de la NAU con un marco integral de seguimiento y evaluación, en claro contraste con la realidad actual de canales limitados de participación en el marco de seguimiento. Estas medidas permitirían una acción concreta hacia la realización de los fines preventivos y correctivos de los derechos humanos en los territorios, teniendo en cuenta los aspectos interseccionales de las desigualdades urbanas y los indicadores de seguimiento desagregados y cualitativos para abordar mejor el desarrollo justo y sostenible de los asentamientos humanos en todo el hábitat humano.

El proceso de Hábitat III reflejó la deliberación de diversos actores para comprometerse colectivamente con acciones que hagan que nuestras ciudades, pueblos, territorios y asentamientos humanos sean más justos, inclusivos, seguros y sostenibles. Surgieron cuestiones clave hacia la adopción de la Nueva Agenda Urbana (NAU), en particular en relación con el respeto, la protección y el cumplimiento de los derechos humanos bajo el paraguas del Derecho a la Ciudad, incluyendo la participación plena y efectiva de las mujeres y la igualdad de derechos; el combate y prevención de la especulación, el desplazamiento, la falta de vivienda y los desalojos forzosos; la garantía de las funciones sociales y ecológicas de la vivienda, la tierra y la ciudad; la necesidad de descentralizar aún más la toma de decisiones y los procesos de asignación de recursos; el reconocimiento de las ciudades como bienes comunes; y la gestión democrática de las ciudades y los territorios a través de enfoques más participativos e inclusivos, como la producción social del hábitat.

Bajo el marco de la Asamblea de ONU-Hábitat, Gobiernos y Ciudades Locales Unidos (CGLU), la Coalición Internacional del Hábitat (HIC),  Huairou Commission y la Plataforma Global por el Derecho a la Ciudad (PGDC) están organizando un evento paralelo paralelo para hacer balance de cómo ha avanzado la implementación de la NAU y de lo que aún queda por hacer. Un panel de múltiples partes interesadas se centrará en las vías para hacer operativos los compromisos de la NAU a través de ejemplos concretos de políticas e iniciativas. En este año en el que se llevará a cabo la revisión intermedia de la Agenda 2030 en la Cumbre de los ODS y se desarrollará el próximo plan estratégico de ONU-Hábitat, el panel renovará el compromiso de múltiples partes interesadas con la implementación de los principios y compromisos de la NAU e identificará pasos concretos para localizar su implementación.

Fecha: 8 de Junio, 18:15h – 19:15h (hora de Nairobi)

Lugar: Sala de Conferencia 6 en la sede de ONU-Hábitat en (Parklands/Highridge, Avenida United Nations Ave, Nairobi, Kenia)

El evento será presencial, pero permanezca atento a nuestras redes sociales donde compartiremos los principales puntos del diálogo. Estas conclusiones servirán de base para nuestra participación en el Foro Político de Alto Nivel y en la Cumbre sobre los ODS.

Para más información visite el post del evento aquí.

 La segunda sesión de la Asamblea de ONU-Hábitat tendrá lugar del 5 al 9 de junio en Nairobi, Kenia. El tema oficial de la sesión es: Un futuro urbano sostenible mediante un multilateralismo integrador y eficaz: alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible en tiempos de crisis mundial”

La Asamblea de ONU-Hábitat es un cuerpo universal compuesto por 193 estados miembro de Naciones Unidas y se reune cada cuatro años (A/RES/73/239). La primera asamblea tuvo luger en 2018. 

Las responsabilidades de la Asamblea de ONU-Hábitat son:

1. Identificar cuestiones clave y áreas de interés para el trabajo normativo y político de ONU-Hábitat;
2. Examinar las principales tendencias relacionadas con los asentamientos humanos y la urbanización;
3. Examinar las normas y estándares mundiales en materia de asentamientos humanos y urbanización sostenible;
4. Adoptar resoluciones, declaraciones, recomendaciones, decisiones formales, informes y otros documentos relativos a la visión estratégica y la orientación política de acuerdo con su mandato;
5. Recomendar estrategias para la aplicación coherente de las dimensiones urbanas y de asentamientos humanos de la Agenda 2030, la Nueva Agenda Urbana y otras agendas mundiales, incluida la labor del sistema de las Naciones Unidas;
6. Examinar y aprobar el plan estratégico de ONU-Hábitat, que preparará el Consejo Ejecutivo;
7. Examinar el informe cuatrienal del Secretario General sobre la aplicación de la Nueva Agenda Urbana.

Además, la Asamblea debe garantizar el compromiso activo de las autoridades locales y otros actores en la Asamblea,en sus órganos subsidiarios y en las reuniones entre sesiones.

La PGDC y sus miembros participaron en la primera edición de la Asamblea (2019). Más información aquí.

 Documentos de referencia

• Borrador del programa

• Programa definitivo

• Informe del director ejecutivo sobre la aplicación de la NAU

• Marco global de monitoreo urbano

• Informe cuatrienal del Secretario General de las Naciones Unidas sobre la aplicación de la NAU

Más información y otros documentos, como las resoluciones presentadas por los Estados, en la página web oficial de ONU-Hábitat.